Sucios Miserables
Se fundaron en enero de 1998 con el guitarrista Martín Ferreyra y el baterista Sergio Barrionuevo. El primer ambiente
Se fundaron en enero de 1998 con el guitarrista Martín Ferreyra y el baterista Sergio Barrionuevo. El primer ambiente de ensayo fue el patio de la casa de Barrionuevo, en el barrio Matera, hasta que la familia habilitó una vieja casilla que se utilizaba como galpón.
Al poco tiempo se sumaron un segundo guitarrista, Willie Fernández, y el cantante Juan Emilio Ferreyra, hermano de Martín. La primera formación se completó con el bajista Marcelo Juárez.
La banda dedicó los primeros años a la composición y al fogueo en presentaciones en el under de la zona oeste del Gran Buenos Aires.
Entre sus influencias se destacan los Rolling Stones, los Beatles, Led Zeppelin, The Who, Aerosmith y Guns N Roses. También locales como Pappo’s Blues, Manal, Serú Girán, Ratones Paranoicos y los Redondos, entre otros. Además hubo influencias secundarias como los artistas populares del barrio, sonidos folklóricos y latinoamericanos que fueron parte musical y cultural de sus integrantes.
El espíritu de la banda siempre fue desandar un camino propio, con canciones auténticas, inspiradas en el paisaje que rodeaba al grupo, en su ambiente particular, sus experiencias personales y de las personas con las que se relacionaban. Captando las señales del entorno con música y poesía.
La banda grabó su primer material homónimo en 2008, en el estudio de La Tribu Tóxica. Sufrieron varios cambios de integrantes pero la banda se mantuvo activa y volvió a grabar su segundo trabajo “La canción que lucha” presentado el 11 de julio del 2020. El disco es un homenaje a la gente común que vive su vida como puede en un mundo cada vez más despiadado, ilusionada con mejorar y salir adelante a pesar de todo. El arte del álbum es obra de la dibujante Florencia Siffredi y del diseñador Milton Vueltas.